La vigesimoquinta edición de la Fiesta del Cine puede dar a entender que llevamos una eternidad acudiendo a las salas a precio reducido, pero en realidad no es nada si lo comparamos con el evento francés que lo inspiró y que lleva funcionando desde 1985. De la misma forma, en la última edición se alcanzó un registro de 1.394.058 espectadores, pero el mejor dato de asistencia desde 2019 está lejos de ser la salvación que las salas necesitan.

Frente a la queja constante que sobrevuela el mundo del cine sobre ese es el problema, uno termina pensando que un evento como la Fiesta del Cine, con cuatro días de entradas a 3,50 euros, es la solución que piden aprovechar los espectadores. Las cifras, en cambio, no opinan lo mismo.

Los espectadores de la Fiesta del Cine 444447

Acumulando casi 33 millones de espectadores desde que se iniciase la Fiesta del Cine, entre 2014 y 2016 se vivieron varias ediciones superando unos 2 millones de espectadores que invitaban a pensar que, tal y como había ocurrido en Francia, la idea estaba cogiendo tracción. Lamentablemente, aquellos récords se toparon con la pandemia y, desde entonces, las cifras no han vuelto a remontar.

Las Películas más taquilleras de la Fiesta del Cine 1383i

Con grandes lanzamientos de Hollywood y entradas a precio reducido son el revulsivo que las salas necesitan, pero no siempre es así.

De hecho, cuando más brilla la Fiesta del Cine no es con películas extranjeras. Fenómenos de factura española como Lo imposible en 2012, Ocho apellidos vascos en 2014, o Un monstruo viene a verme en 2016, se encuentran entre las películas que más gente han arrastrado a las salas desde que el evento echó a rodar.

Ejemplos como Joker, Gravity y algún tímido acercamiento de Marvel se cuentan entre los bombazos hollywoodienses más exitosos, pero en cualquier caso su impacto respecto al total anual está peligrosamente cerca de ser anecdótico. De hecho, el terror y los acontecimientos familiares suelen ganarle la partida a esos bombazos.

Incluso si nos agarramos a los mejores años de la Fiesta del Cine, entre 2014 y 2019, si comparamos los resultados de la taquilla total en España con los espectadores de los dos eventos anuales, el porcentaje está muy lejos de ser una grata sorpresa. Teniendo en cuenta la media de precios de la época, 2,90 euros para el evento a precio reducido y unos 6 euros para la taquilla convencional, este es el peso de la Fiesta del Cine en sus mejores escenarios.

La película más taquillera vs Fiesta del cine 4g5wd

La comparativa es aún más demoledora cuando, al analizar el total de espectadores de cada Fiesta del Cine, lo enfrentamos a las cifras de la película más taquillera de ese año. En la mayoría de los casos el total de los eventos a precio reducido suponen una pequeña parte de lo que representan las taquillas totales de esos éxitos, lo que sumado al precio reducido demuestra que lo que termina arrastrando a la gente al cine no tiene nada que ver con el coste de las entradas, sino con lo llamativo de cada película.

Los ejemplos de Un monstruo viene a verme o el de 8 apellidos vascos, que contaron con intensísimas campañas promocionales en televisión por venir apadrinadas por Antena 3 y Telecinco, hacen que sea aún más evidente el peso de un marketing que se ha ido diluyendo con el paso de los años, dando por hecho que el ruido en internet era más que suficiente para promocionar las cintas.

La Fiesta del Cine sa 6d6964

Frente a un impacto real en caja relativamente anecdótico, resulta inevitable asomarse al modelo francés para ver cómo les funciona allí. La realidad es que sus cuatro días a 5 euros ronda una media de entre 3 y 3,5 millones de entradas por edición, el doble de lo que suele suponer en España manteniéndose en una media del 5% de su población a un precio más alto.

Es cierto que en el caso de Francia e suma una mezcla de tradición y fidelización con una cultura distinta respecto al mundo del cine, pero en la comparación con España resulta aún más evidente que la clave del éxito detrás de la Fiesta del Cine no sólo está en el precio por muy agresiva que sea la rebaja, sino en la combinación de ese incentivo y grandes carteleras.

A escasas semanas de que los niños empiecen las vacaciones de verano uno podría pensar que la fecha tampoco es la más acertada para sacar pecho con los números, que 337 salas frente a las más de 700 que hay repartidas por todo el país es quedarse corto, y que el miedo a ver una avalancha de gente acudiendo a las salas a ver la película como si estuviese en su casa termina echando a muchos para atrás. Si Tom Cruise y Lilo & Stitch son suficientes para generar un revulsivo capaz de mitigar todo eso y devolver a la Fiesta del Cine a sus días de gloria, es algo que veremos esta misma semana.

Imagen | InvictusGames en Midjourney

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